Nuestra consulta de psicología nace hace unos años en Fuengirola, aunque poco a poco y gracias a todas las personas que nos visitan y nos recomiendan, hemos ampliado nuestras consultas a las localidades de Mijas y Marbella recientemente.
En PersonalMente Psicólogos trabajamos la psicología desde una vertiente contextual, enfocando cada problemática de cada persona en un momento dado, y debido a su historia, con un “traje a medida” de lo que cada persona necesite, sin ceñirnos a un estándar, ya que cada uno de nosotros somos diferentes y necesitamos un procedimiento diferente. Ésta es la piedra angular de nuestro equipo de psicólogos en Fuengirola, de nuestra forma de trabajo y de las terapias contextuales de tercera generación.
Nuestra empresa cuenta con grandes profesionales en Fuengirola, que podrán ayudarte con las técnicas más innovadoras en todos los aspectos de tu vida que te gustaría mejorar.
En PersonalMente Psicólogos Fuengirola recibirás una atención totalmente personalizada e individualizada para ti.
Atención personalizada en nuestra consulta, en pleno centro de Fuengirola donde con total confidencialidad, no aplicaremos un protocolo estandarizado, sino adecuado a usted y sus circunstancias.
Para todas aquellas personas que por tiempo, distancia, o simplemente lo prefieran, ofrecemos servicios de psicólogos en Fuengirola y Mijas a través de terapia online, videoconferencia, mensajería instantánea y consulta vía medios electrónicos
Al igual que el servicio online, tal vez usted prefiera por algún motivo (tiempo, discreción, ambiente más seguro para usted, etc) la atención en su propio domicilio.En PersonalMente Psicólogos en Fuengirola y Mijas llevamos la terapia psicológica hasta su propio hogar.
La imagen que se tiene hoy en día de la psicología es muy distinta de la que se tenía hace no tanto tiempo. Hasta hace poco, la persona que acudía a terapia era etiquetado como loco, una persona con problemas que necesitaba de un profesional para que se los resolviera. Sin embargo, lo cierto es que pedir ayuda es un acto de coraje y madurez.
Poco a poco, por suerte, se ha ido cambiando este concepto, y cada vez más gente viene a terapia por motivos de desarrollo personal, convivencia, relaciones de pareja y personales, asuntos familiares, estrés laboral, etc. Problemas cotidianos pero que nos causan malestar y no nos permiten tener una vida tan placentera como nos gustaría.
¿Es cierto que vamos al dermatólogo, ginecólogo, dentista u oncólogo ante las primeras dudas? O incluso, como prevención ¿Qué pasaría si buscáramos asesoramiento para entender qué tipo de alimentación es la que nos ayudaría a conseguir una salud general plena? Probablemente lo que ocurriría sería que descenderían los casos de enfermedades, pues las personas mantendrían unos hábitos saludables.
¿Qué pasaría si pensamos en la terapia psicológica en estos términos? Pensemos en que, en lugar de ir a terapia cuando tenemos un problema, vengamos como prevención y autodesarrollo personal, para conocernos mejor a nosotros mismos.
Cualquier persona puede beneficiarse de los que incrementan y mantienen el bienestar general, y promueven la libertad para tomar decisiones.
Y las razones para ir al psicólogo en Fuengirola todavía son más: estar demasiado irascible o no poder parar de llorar ante cualquier comentario aparentemente neutro, problemas serios para conciliar el sueño o dificultad para concentrarse, ver la vida siempre en negativo, dificultad para comunicar tus sentimientos, no saber decir “NO”, falta de deseo sexual, culpa irracional, nervios, angustia, etc.
A veces puede ocurrir un acontecimiento traumático, como puede ser el fallecimiento de un familiar, si te acabas de separar de tu pareja, si ha habido alguna infidelidad y/o malos tratos, etcétera. Todas estas situaciones son una buena oportunidad para tratar estos temas con un psicólogo en Fuengirola y Mijas.
La decisión de pedir ayuda no siempre es fácil, sobre todo porque a veces pensamos que significa reconocer un fracaso o la debilidad de no poder hacerlo solo. Pedir ayuda a un psicólogo es aún más complicado, porque se le suman los estereotipos mencionados que existían sobre la salud mental.
Del mismo modo que no tiene sentido soportar un dolor de muelas, tampoco tiene sentido aguantar el dolor psicoemocional. De hecho, el cuerpo no suele avisar poco a poco, si no que las emociones reprimidas, antes o después salen a la luz. Los sentimientos y los traumas que no se expresan, o se expresan de manera inadecuada, terminan acumulándose en el inconsciente y, cuando se presentan ciertos factores, explotan de golpe generándonos un estado de malestar constante.
Otra buena razón para ir al psicólogo en Fuengirola es cuando se presenta una decisión importante en tu vida, para profundizar en tus necesidades y tener una visión más objetiva y con perspectiva de lo que deseas.
Un psicólogo no te va a resolver tus problemas, te va a ayudar a encontrar la solución.
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